Todo comenzó cuando Maddy y su madre estaban en un desfile de moda. En ese momento, Maddy dijo: “mamá, yo, modelo”. La madre dijo que su niña siempre le había gustado estar en el centro de atención, y sabía que quería subirse a una pasarela desde entonces. Por supuesto, ella tuvo que explicarle que no eran tan fácil como pensaba, algo que no cayó tan bien, tal como podemos imaginar. Pero la madre sabía que a partir de ese momento, su hija haría algo especial. Nueve meses más tarde, fueron a ver a un fotógrafo profesional.
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Maddy estaba muy emocionada por hacer su primera sesión de fotos. Una cosa es decir que quieres hacer algo, pero otra es experimentar cómo se hace y decir que realmente te gusta. Después de muchos halagos y buenas opiniones, la madre creó un perfil en Facebook, y en una semana sus fotos recorrieron el mundo. Al final, sirvieron como esperanza para que las personas que viven con sus hijos con síndrome de down supieran que pueden lograr cualquier cosa que se propongan.
Desde entonces, Maddy ha caminado en las pasarelas de Nueva York y se convirtió en la cara de una empresa de cosméticos llamada Glossigirl, la primera modelo discapacitada en hacer esto. Ella ahora es conocida como la primera modelo profesional adulta con síndrome de Down en el mundo, y eso le sirve a ella mismo como apoyo. Pero todo esto no acaba aquí, porque ahora vienen con muchas nuevas y buenas noticias.
“Por supuesto, esto es sólo el principio, y no se trata solamente sobre el modelaje, sino de cambiar el mundo, de la creación de la inclusión, detener la discriminación y romper los muros del confinamiento. El modelaje es lo que está permitiendo hacerlo. Cada uno queremos amar y ser amados, eso es lo que importa”, dijo la madre de Maddy.
En algunas imágenes que compartió en las redes sociales, Maddy se muestra feliz con su novio, Robbie Streeting, que festejó sus 20 años de edad. “Feliz cumpleaños a mi bello novio”, escribió Madeline ante sus 88.000 seguidores de Instagram, junto a una foto que los muestra besándose.
La pareja estuvo saliendo durante mucho tiempo, pero recién ahora hicieron público su amor. Más tarde, Madeline publicó en Instagram otra foto bien cotidiana. Se la puede ver con su novio en la entrada de un cine, con pochoclos y gaseosas en mano.
Una escena simple de que se ganó el corazón de mucho: consiguió reunir cerca de 3.600 “me gusta”. “Esta joven pelirroja disfruta de su fama. Le encanta ser el centro de atención, que la gente la mire y sentirse alguien cool”, comentó su madre, Rosanne Stuart, durante la Fashion Week de Nueva York.
También recordó que, cuando era niña, a menudo era dejada de lado. “Ahora la gente es mucho más abierta. Las redes sociales abrieron todo. Hoy ya nada se esconde”, afirmó. Y confía en que el ejemplo de Madeline logre convencer a los padres de que sus hijos con síndrome de Down pueden llevar una existencia feliz.
El destino de esta chica cambió un día de mayo del año pasado, cuando puso en Internet imágenes en las que posaba como una modelo. Rápidamente obtuvo 20.000 seguidores en Facebook, que hoy suman casi medio millón. Las marcas pusieron sus ojos en ella: la joven empresa estadounidense EverMaya bautizó con su nombre un bolso y lo recaudado por su venta se destinó a la asociación nacional de síndrome de Down.
También se convirtió en la embajadora de una pequeña marca californiana de cosméticos, Glossigirl. Mientras disfruta de su romance, Madeline continúa con su carrera y sigue cosechando éxitos. En su país ya es muy reconocida: participó en el Sunshine Coast Fashion Festival y consiguió ser nominada para el premio “Australiano del año 2016”. ¡A partir de ahora, sólo nos queda desearle toda la suerte del mundo a esta chica de corazón fuerte! Por favor, comparte este artículo para que todo el mundo lea su historia de superación.
Fuente: Instagram - madelinesmodelling_
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